Tabla de contenidos
- 1 Recomendaciones para mejorar la salud del corazón
- 1.1 – Deje de fumar
- 1.2 – Cuide su peso
- 1.3 – Adopte una dieta saludable y equilibrada
- 1.4 – Cuide su peso
- 1.5 – Luche contra el sedentarismo
- 1.6 – Revise su presión arterial regularmente
- 1.7 – Trate su diabetes
- 1.8 – Maneje el estrés
- 1.9 – Controle los niveles de colesterol y triglicéridos
- 1.10 – Practique una buena higiene bucal
- 2 ¿Cómo cuidar la salud del corazón en niños y adolescentes?
- 3 Importancia de cuidar la salud del corazón
- 4 Enfermedades del corazón
- 5 Manejo de las emociones y el estrés en enfermedades cardiovasculares
- 6 Día Mundial del Corazón: una ocasión para la concienciación
Recomendaciones para mejorar la salud del corazón
Aparte de la herencia, el sexo y la edad, los principales factores de riesgo cardiovascular son modificables y, por tanto, son aquellos sobre los que puede actuar la prevención:
– Deje de fumar
Entre los factores de riesgo, dejar de fumar es el más fácil de modificar y el menos costoso. Dejar de fumar previene la trombosis y el infarto, reduce el riesgo de recurrencia y muerte en un 50% cuando se elimina el hábito después de la aparición de un problema cardíaco.
Nunca es demasiado tarde para dejar de fumar; sin embargo, cuanto antes deje de hacerlo, su cuerpo podrá comenzar a sanar y reparar el daño causado por el consumo de tabaco.
– Cuide su peso
El sobrepeso es un factor de riesgo importante para las enfermedades cardiovasculares, pero también es responsable de otros factores contribuyentes como hipertensión, diabetes o colesterol. El riesgo cardiovascular es alto cuando hay exceso de grasa en la cintura y el estómago.
– Adopte una dieta saludable y equilibrada
La alimentación, también, es importante para prevenir el aumento del colesterol. Tenga preferencia por los vegetales, las proteínas, las frutas y verduras, el pescado y las carnes blancas.
Se recomienda utilizar aceite de oliva y condimentos naturales como el ajo y las especias no procesadas con un bajo consumo de sal. Puede reducir sus triglicéridos, otra forma de grasa en el cuerpo, siguiendo una dieta baja en azúcar y alcohol.
– Cuide su peso
El sobrepeso es un factor de riesgo importante para las enfermedades cardiovasculares, pero también es responsable de otros factores contribuyentes como hipertensión, diabetes o colesterol. El riesgo cardiovascular es alto cuando hay exceso de grasa en la cintura y el estómago.
Por tanto, lo ideal es controlar el peso y si tiene kilos de más, lo mejor es perderlos con un estilo de vida saludable, evitando dietas excesivas que no pueda mantener a largo plazo.
– Luche contra el sedentarismo
Para cuidar su corazón, ¡haz algo de deporte! No es necesario transformarse en un atleta de alto rendimiento, los pequeños esfuerzos diarios ya son efectivos como: subir las escaleras en lugar de tomar el ascensor, caminar con paso firme, si toma el autobús o el metro, bájese una estación antes de su parada para caminar 15 ó 20 minutos cada día. Use un cuenta pasos, se recomiendan 10.000 pasos diarios para mantenerse saludable.
– Revise su presión arterial regularmente
Su médico, también, debe controlar su presión arterial y tratarla si aumenta. También puede comprobarlo usando un tensiómetro. De hecho, la presión arterial alta, si no se controla, dañará el corazón y los vasos sanguíneos con el tiempo. Los vasos se endurecerán y engrosarán (aterosclerosis).
– Trate su diabetes
Se sabe que la diabetes daña los vasos sanguíneos y promueve la aterosclerosis. Entonces se multiplica el riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular. Por tanto, es importante diagnosticar la posible diabetes y tener un tratamiento adecuado con un seguimiento regular por su médico tratante.
– Maneje el estrés
El estrés es dañino para la salud porque aumenta la presión arterial, frecuencia cardíaca y debilita el sistema inmunológico. También influye en la aparición de enfermedades cardiovasculares, en particular el infarto de miocardio.
Así que trata de combatir el estrés, esto puede implicar la práctica de algún deporte, meditación, relajación, consultas con un psicólogo si es necesario, encuentra la solución que más te convenga.
– Controle los niveles de colesterol y triglicéridos
Debe evaluar su colesterol, al menos, con regularidad antes de los 40 años. El Instituto Nacional del Corazón, los pulmones y la sangre de Estados Unidos “recomienda que los hombres de entre 45 y 65 años y las mujeres de entre 55 y 65 años se realicen análisis de colesterol cada 1 o 2 años. Las personas mayores de 65 años deben hacerse análisis de colesterol una vez al año”.
Si no tiene factores de riesgo, igual se aconseja conocer los valores de su colesterol total y triglicéridos.
Si, por el contrario, tiene un factor de riesgo, debe hacer una valoración lipídica completa, incluyendo la dosis de HDL (colesterol bueno) y el cálculo de LDL (colesterol malo). Dependiendo de los valores su médico le puede prescribir una dieta baja en grasas o la toma de un medicamento.
– Practique una buena higiene bucal
Menos conocido, este consejo es, sin embargo, muy importante. Tener una boca sana limita la aparición de enfermedades cardiovasculares. La periodontitis o enfermedad de las encías provoca sangrado, favorece el paso de bacterias a la sangre y puede afectar las válvulas del corazón.
Por lo tanto, adquiera el hábito de cepillarse los dientes 3 veces al día durante 2 minutos, después de cada comida.
¿Cómo cuidar la salud del corazón en niños y adolescentes?
Se estima que el 3% de los niños sufren de sobrepeso, y la mayoría de las veces no es diagnosticado, y más del 3% de los escolares entre 6 y 16 años tienen una presión arterial elevada (hipertensión arterial), asociada al sobrepeso.
La Organización Mundial de la Salud aconseja que los niños de 5 a 17 años realicen, como mínimo, 60 minutos de ejercicio físico al día. Para ello, te ofrecemos las siguientes opciones:
- Actividades deportivas extraescolares son una alternativa práctica según la disponibilidad logística de cada familia.
- Actividad física 2 o 3 días por semana en familia genera bienestar físico y mental. Pueden realizarse juegos en equipos, excursiones, caminatas, o la búsqueda de un tesoro. Esta actividad contribuye a eliminar el estrés acumulado durante la semana de las obligaciones laborales y escolares, y proporciona un excelente estado mental de bienestar. El ejercicio es sano de por sí, pero lo es más aún si se realiza en familia.
- Aprender juntos en familia un deporte puede generar gran satisfacción así como mayor integración y confianza.
- Los deportes de raqueta (el tenis, el bádminton, y el squash), o la natación estimulan el desarrollo muscular y la coordinación neuromuscular, así como el nivel cardiovascular, ya que implica una actividad neurológica que facilita el control de la presión arterial. Igualmente el aerobic o la danza intervienen en la coordinación neuromuscular positiva para nuestro sistema cardiovascular. Estos deportes son algunos de los que generan mayores beneficios al corazón, demostrado científicamente. Implican un ejercicio aeróbico con movimientos de amplios grupos musculares, pero sin una exigencia que amerite esfuerzo extremo y generan satisfacción desde el punto de vista de la inteligencia emocional y social.
- Cuando las condiciones de nuestro día a día no lo permitan, tan sólo unos minutos de baile en casa pueden ser muy beneficiosos y divertidos.
La actividad física junto a una alimentación balanceada es la combinación para el éxito.
Importancia de cuidar la salud del corazón
El corazón es un músculo que bombea sangre llena de oxígeno a todas las partes de su cuerpo. Este trabajo mantiene viva cada célula, órgano y sistema dentro de su organismo. Para mover la sangre a cada parte, su corazón depende de sus vasos sanguíneos. Juntos, el corazón, la sangre y los vasos sanguíneos forman el sistema cardiovascular.
Este sistema mueve la sangre del corazón transportando oxígeno y nutrientes por todo su cuerpo y también recoge los productos de desecho para que su organismo pueda deshacerse de ellos.
Por lo tanto, cuidar su corazón es una necesidad para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y otras dolencias.
Con un ritmo de vida que cada vez es más veloz, reaccionamos más rápido al estrés, comemos peor y reducimos mucho los esfuerzos físicos y los ejercicios ya sea al aire libre o en el gimnasio.
Además, con el paso de los años, el mecanismo cardíaco se vuelve más frágil y es de suma importancia, para mantener una buena salud, continuar fortaleciendo el corazón a través de ejercicios deportivos.
El estrés también puede ser perjudicial para su corazón. Si está estresado, su presión arterial y su frecuencia cardíaca aumentan. El estrés expone su cuerpo a niveles altos de cortisol, y también puede cambiar la forma en que se coagula la sangre. Por eso es importante hacer ejercicios, actividades agradables y relajarse lo más posible.
Enfermedades del corazón
La enfermedad cardíaca se refiere a varios tipos de afecciones del corazón. El tipo más común de enfermedad cardíaca es la enfermedad de las arterias coronarias que afecta el flujo sanguíneo al corazón. El descenso del flujo sanguíneo puede ocasionar un ataque cardíaco.
Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dicen que “las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de defunción en el mundo y, según estimaciones, se cobran 17,9 millones de vidas cada año”. Entre estas enfermedades que afectan al corazón tenemos:
– Insuficiencia cardíaca
La insuficiencia cardíaca ocurre cuando la acción de bombeo del corazón ya no es lo suficientemente fuerte para mantener el flujo de sangre, especialmente durante la actividad física y situaciones estresantes.
Además, es posible que el músculo cardíaco no se relaje adecuadamente para permitir que la sangre regrese de los pulmones al corazón.
El corazón se debilita demasiado para bombear sangre por todo el cuerpo, lo que puede provocar la acumulación de líquido en los pulmones, lo que dificulta cada vez más la respiración.
La insuficiencia cardíaca puede ocurrir de dos maneras: repentinamente (insuficiencia cardíaca aguda) o de forma gradual (insuficiencia cardíaca crónica).
– Enfermedad coronaria del corazón
Esta enfermedad cardíaca causa un flujo sanguíneo insuficiente al miocardio. Es causada por la acumulación de depósitos de grasa en el revestimiento de las arterias. Estos depósitos están compuestos por colesterol, calcio y otras sustancias transportadas por la sangre.
Esta acumulación de grasa se llama placa aterosclerótica. La formación de placas puede bloquear las arterias coronarias y hacerlas rígidas e irregulares. Esto se conoce como endurecimiento de las arterias o aterosclerosis.
– Ataques al corazón o infarto
Un ataque cardíaco ocurre cuando el suministro de sangre a una parte del corazón se interrumpe por un bloqueo en una arteria coronaria. Privadas de oxígeno, las células de esta parte del músculo cardíaco mueren gradualmente hasta que se restablece el suministro.
La extensión del daño varía según la duración de la interrupción: el daño cardíaco puede ser leve, severo o irreversible. En algunos casos, el ataque cardíaco puede ser fatal.
– Accidente cerebrovascular (ACV):
Un derrame cerebral ocurre cuando el flujo de sangre a una parte u otra del cerebro se encuentra con un obstáculo. Esta interrupción causa daño a las células cerebrales, que no se pueden reparar ni reemplazar.
Las secuelas del accidente cerebrovascular dependen de qué parte del cerebro sufrió daño y de la extensión de ese daño.
Hay 2 tipos de accidentes cerebrovasculares:
- Isquémico: cuando un coágulo de sangre bloquea un vaso sanguíneo en el cerebro. Este tipo representa el 80% de todos los casos.
- Hemorrágico: ocurre cuando hay una arteria rota en el cerebro. La interrupción del flujo sanguíneo causa daño cerebral.
– Alteraciones del ritmo cardíaco (arritmias)
La arritmia es una anomalía que afecta la frecuencia cardíaca normal. Con la arritmia, el corazón tiende a latir demasiado lento (bradicardia), demasiado rápido (taquicardia) o de forma irregular. Estas anomalías pueden afectar la cantidad de sangre que puede bombear el corazón.
Muchas formas de arritmia no causan ningún problema de salud; sin embargo, pueden causar una variedad de síntomas molestos, como mareos o dolor en el pecho. Otras formas de arritmias, más peligrosas, repercuten en el riego sanguíneo y, por tanto, requieren tratamiento médico.
Manejo de las emociones y el estrés en enfermedades cardiovasculares
Desde que nacemos, nuestro organismo somatiza los estados de ánimo y cada una de las partes de nuestro cuerpo recibe estímulos distintos según las emociones que atravesamos.
De esta manera, cuando se está alegre o asustado se alteran tanto el corazón como la presión arterial; cuando se está preocupado se altera el cerebro; cuando hay ansiedad se altera el sistema digestivo, y así sucesivamente.
Es clave para el ser humano saber controlar tanto las emociones repentinas como los estados de ánimo desmedidos para que no afecten al sistema cardiovascular con un choque inesperado como lo puede ser un susto o alguna impresión impactante; o alguna alegría o depresión sin estabilidad ni control. Los primeros estados de ánimo inciden directamente en el corazón, mientras que los últimos afectan al comportamiento arterial de las personas.
Por otro lado, el estrés es uno de los estados de ánimo que más ha sido objeto de estudio para los especialistas en los últimos años debido al mundo tan acelerado en el que se desenvuelve la sociedad actualmente.
Incluso, diversos estudios destacan que el exceso de estrés es causante de enfermedades como hipertensión, hiperglicemia, dificultades en el sistema nervioso central, úlceras que pueden convertirse en tumores cancerígenos, e incluso infartos.
En concordancia, la Sociedad Europea de Cardiología señala que la depresión, el estrés laboral y familiar, la falta de apoyo social y la ansiedad contribuyen al riesgo de contraer una enfermedad cardiovascular. Por ende, es importante que las personas gestionen efectivamente sus emociones para conservar su buen estado de salud.
Además, los médicos recomiendan comer saludable, hacer ejercicio, organizar viajes, tiempo aire libre y actividades de relajación. Al favorecer la liberación de hormonas como dopamina, serotonina y oxitocina, estas acciones disminuyen el estrés y aumentan las sensaciones de felicidad y serenidad.
Día Mundial del Corazón: una ocasión para la concienciación
Como todos los años, el 29 de septiembre es el Día Mundial del Corazón dedicado a la prevención para mantener el corazón sano, concienciar sobre la enfermedad cardiovascular que causa casi la mitad de todas las enfermedades no transmisibles del mundo y promover la importancia de un estilo de vida saludable para el corazón.
La iniciativa fue creada por la Federación Mundial del Corazón (World Heart Federation) para sumarse a la campaña «25by25» iniciada en mayo de 2012 por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El objetivo de esta campaña es instar a todos los países del mundo a implementar las mejores estrategias para reducir, para 2025, el 25% de las muertes prematuras causadas por enfermedades crónicas (no transmisibles) como las del corazón, los vasos sanguíneos y la diabetes.
El Día Mundial del Corazón tiene como finalidad impulsar acciones para educar a las personas que controlando factores de riesgo como el consumo del cigarro, una dieta poco saludable y la inactividad física, se podrían evitar al menos la mayoría de las muertes prematuras por enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
De acuerdo con la Organización Panamericana de Salud (OPS), las enfermedades cardíacas siguen siendo la primera causa de mortalidad en el mundo.
Explican que “el número de muertes debidas a las cardiopatías ha aumentado desde 2000 en más de 2 millones de personas, hasta llegar a casi 9 millones de personas en 2019. Las cardiopatías representan en estos momentos el 16% del total de muertes debidas a todas las causas”.
Cada 29 de septiembre, el Día Mundial del Corazón, es un evento global durante el cual personas, familias, comunidades y gobiernos de todo el mundo participan en actividades para hacerse cargo de la salud de su corazón y la de los demás. Utilice el corazón para mejorar su salud.